Alma (Citas) II...

Gustave Flaubert (1821-1880):

• A un alma se la mide por la amplitud de sus deseos, del mismo modo que se juzga de antemano una catedral por la altura de sus torres.
• Ten cuidado con tus sueños, son las sirenas de las almas. Ellas cantan. Nos llaman. Las seguimos y jamás retornamos.

Jacques Benigne Bossuet (1627-1704):

• La tristeza es la pasión por la que el alma, atormentada por el mal presente, se aleja de él lo más que puede y se aflige.
• La alegría es la pasión por la que el alma goza del bien presente y descansa en él.

Mahabharata:

• El alma fuerte, imperturbable, la de calma entera, la que soporta con indiferencia placeres y amarguras, ésa vive sin morir en la vida.
• El mundo es fuerte, pero más fuerte es el hombre que lo gobierna; y es soberana el alma, que gobierna al hombre.

Marco Tulio Cicerón (106-43 A.C.):

• Como el rostro es imagen del alma, los ojos son sus delatores.
• Hay enfermedades del alma mas perniciosas que las del cuerpo.
• Todas las almas son inmortales, pero las de los justos y héroes son divinas. ("De legibus", libro II)

Miguel de Unamuno (1864-1936):

• Ahora empiezo a meditar lo que he pensado, y a verle el fondo y el alma, y por eso ahora amo mas la soledad, pero aún poco.
• El amor es, sobre todos los sentimientos del alma, el que más se parece a la eternidad, el que más nos acerca a ella.
• En nosotros nacen y mueren a cada instante oscuras conciencias, almas elementales, y este nacer y morir de ellas constituye nuestra vida. ("El sentimiento trágico de la vida")

Victor Hugo (1802-1885):

• Ciertos pensamientos son plegarias. Hay momentos en que, sea cual fuere la actividad del cuerpo, el alma está de rodillas.
• Cuando el amor es feliz lleva al alma a la dulzura y a la bondad.
• El alma tiene ilusiones, como el pájaro alas; eso es lo que la sostiene.
• El cuerpo humano podría no ser más que una apariencia que oculta nuestra realidad: la realidad del alma. ("Les travailleurs de la mer", I, p.III, 1)
• ¿Existe el alma? La pervivencia de la propia personalidad es como la sed del hombre. Sin esta persistencia del "yo", toda la creación no es para él otra cosa que un inmenso "¿Para qué?". Así, pues, prestad oídos a la fulgurante afirmación que surge del fondo de la conciencia. La suma de Dios que se muestra sobre la tierra en todos los hombres, se condensa en un solo grito que proclama la existencia del alma. ("W. Shakespeare", I, 5, 1)

Anónimos:

• El que escribe en el alma de un niño escribe para siempre.
• Pocas cosas liberan mejor el alma del ser humano que la risa.
• Hay tres tipos de negros: Los negros de piel, los negros de alma y los negros de mierda.