¡Hay almas tan melódicas como si fueran ríos
o bosques a las orillas de los ríos!
o bosques a las orillas de los ríos!
P. Barba-Jacob, Los desposados de la muerte.
Desear lo imposible y ser insensible a los males ajenos: he ahí las dos grandes enfermedades del espíritu.
Bias de Priene.
El alma humana no vive sino de su incesante esfuerzo por dejar su impronta, como la de un sello imperial, sobre todas las cosas.
G. D'Annunzio, Laudi, I.
Sin una idea superior no pueden subsistir ni un hombre ni una nación. Y sólo una idea superior hay en este mundo: la idea de la inmortalidad del alma humana. Todos los otros ideales superiores en los que puede fundamentar su vida el hombre, surgen nada más que de esta idea.
F. Dostoiewsky, Diario de un escritor.
Yo diría, con Lorenzo de Médicis, que quienes no esperan otra vida están muertos también para la presente.
J.P. Eckermann, Gesprächemit Goethe (25 feb.1824)
Un moderado optimismo, tal como el que nace de una filosofía sincera de la vida, pertenece a la dietética del alma.
E. Feuchtersleben, Zur Diät der Seele.
¡Alma humana, cómo te asemejas al agua! ¡Destino humano, cómo te pareces al viento!
J.W. Goethe, Gesang der Geister
[über den Wassern, 1789.
[über den Wassern, 1789.
El alma necesita pocas cosas; el cuerpo, muchas.
G. Herbert, Jacula Prudentum.
Hay hombres que tienen de alma nada más que lo bastante para preservar a su cuerpo de descomposición.
O. Holmes, Autocrat of the Breakfast.
El espíritu esforzado y profundo es aquel que puede abarcar igualmente lo grande y lo pequeño.
S. Johnson, Boswell's Life of Johnson, VI, pág.1778
Pide un ánimo fuerte, libre del miedo de la muerte, y que considere al último momento de la vida como una bendición de la naturaleza y que esté dispuesto a soportar cualesquiera trabajos.
Juvenal, Sátiras, X, 357.
Tengo el alma de nardo del árabe español.
M. Machado, Adelfos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario